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Vértigo y fitoterapia: extracto de Ginkgo biloba



Respeto a los trabajos publicados de fitoterapia basada en la evidencia, he elegido estos dos que me han parecido interesantes respecto al extracto de Ginkgo biloba (EGb 761) para el tratamiento sintomático de alteraciones en la microcirculación cerebral, como vértigo o de los síntomas asociados a insuficiencia circulatoria en las extremidades, tales como calambres y sensación de frío en las piernas (Figura 1).

Figura 1

La fitoterapia es la ciencia que estudia la utilización de los productos de origen vegetal con finalidad terapéutica, ya sea para prevenir, para atenuar o para curar un estado patológico.

Los medicamentos o productos fitoterápicos, son medicamentos con principios activos exclusivamente de origen vegetal y/o preparados de drogas vegetales.

Según el Real Decreto 1345/2007 en relación con el uso de plantas medicinales, “solo pueden denominarse como medicamentos aquellos productos a base de plantas que hayan superado los estándares de calidad, eficacia, seguridad e información que se exige a los medicamentos”.

El Ginkgo biloba es un árbol caducifolio, originario de extremo Oriente, de porte mediano que puede alcanzar 35 metros de altura, con copa estrecha, algo piramidal y formada por uno o varios troncos.

Es una especie muy longeva; se han llegado a localizar algunos ejemplares con más de 2.500 años. EGb 761 se extrae de las hojas verdes del árbol una vez desecadas.

En el estudio de la eficacia en el vértigo idiopático persistente, estudio prospectivo, aleatorizado, doble ciego controlado con placebo, se concluyó que el 85% de los pacientes tratados con EGb 761 notificó una mejoría subjetiva importante, el 47% de los pacientes tratados estaban libres de síntomas al final del estudio versus un 18% en el grupo tratado con placebo y se mostró una mejoría estadísticamente significativa con EGb761 comparado con placebo.

En un estudio en el que se compara la eficacia y seguridad del extracto de Ginkgo biloba (EGb 761) con betahistina en las dosis recomendadas en pacientes con vértigo, los dos fármacos fueron igualmente eficaces en el tratamiento del vértigo (Figura 2).

Figura 2