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Comorbilidades emergentes en asma


Dra. María del Carmen Antón Sanz | Medicina Familiar y Comunitaria

Consultorio Local de Alpedrete del Servicio Madrileño de Salud, Madrid


El asma es un síndrome heterogéneo que se manifiesta con distintos fenotipos y que puede darse a diferentes edades. La edad del paciente asmático puede condicionar la importancia de determinadas enfermedades concomitantes (las llamadas «comorbilidades») que pueden modificar sus manifestaciones y su evolución clínica. Aunque la mayoría de los ensayos clínicos en asma se han realizado en pacientes seleccionados que no suelen presentar enfermedades relevantes, en la vida real la presencia de comorbilidades es muy habitual, especialmente en adultos o en pacientes de edad avanzada, en los que la comorbilidad no es una excepción, sino la regla. Mientras que los pacientes con asma de inicio en la infancia pueden presentar comorbilidades comunes como la rinoconjuntivitis o patologías bien caracterizadas como la enfermedad por reflujo gastroesofágico o la disfunción de cuerdas vocales, en los pacientes adultos el asma puede coexistir con otro tipo de alteraciones cuya frecuencia aumenta con la edad, como: obesidad, diabetes, síndrome metabólico, cardiopatías o trastornos psiquiátricos. En ocasiones aparecen de forma simultánea en el mismo paciente, lo que puede generar un mayor número de patologías en estos pacientes (la denominada «multimorbilidad»). En este escenario, parece evidente la necesidad de dirigir nuestra atención a enfermedades que van a confluir con el asma en muchos de nuestros pacientes; y, especialmente en aquellos con un control deficiente de la enfermedad.

Aunque existen evidencias que avalan la relación del asma con diversas patologías de elevada incidencia (Figura 1), para ayudar al clínico en el control del paciente asmático es preciso conocer cuál es el significado de una comorbilidad particular en la evolución del asma, su gravedad, la función pulmonar y cómo afecta al tratamiento. Para una completa comprensión necesitamos estudios clínicos que evalúen el efecto de una determinada comorbilidad en la actividad del asma: estudios en un entorno experimental diferente, como la cuantificación de ciertos mediadores en muestras grandes de población y la valoración posterior en el desarrollo de asma. Muchas de las comorbilidades asociadas al asma se manifiestan como un conjunto de enfermedades en las que se ha sugerido la implicación de mecanismos fisiopatológicos comunes, lo que apunta a la existencia de una serie de elementos de interacción entre el asma y distintas comorbilidades que se vinculan entre sí, al menos en patologías relacionadas como la obesidad, el síndrome metabólico y la diabetes. En este sentido, se han relacionado varios mediadores, como la interleucina 622 y la dimetilargininaasimétrica 23, tanto con el asma como con otras comorbilidades.

En definitiva, en un gran número de pacientes con asma, la presencia de enfermedades crónicas tiene un peso importante, se relaciona con su tratamiento no programado e implica necesidades médicas complejas.


Bibliografía y referencias: