La insulina puede conservarse a temperatura ambiente durante más tiempo del que se pensaba
Según las diferentes fichas técnicas de las insulinas, estas deben conservarse un máximo de ocho semanas una vez abiertas en temperaturas no superiores a 30 °C y en nevera entre 2 ºC y 8 ºC, evitando siempre su congelación. Sin embargo, los resultados de una revisión de la asociación Cochrane indican que es posible almacenar sin abrir envases de insulina humana de acción corta y de acción intermedia a 25 °C por un máximo de 6 meses y a 37 °C durante un máximo de 2 meses sin que se produzca una pérdida en su efectividad.
Este estudio amplía, por tanto, la posibilidad de conservación de este fármaco, sobre todo, si se tiene planeado viajar a lugares con temperaturas altas. Aun así, siempre se recomienda viajar con algún contenedor refrigerado. También es aconsejable programar algún tipo de alarma para que nos recuerde la fecha de caducidad de la insulina, sobre todo, si la conservamos en lugares diferentes.
Bibliografía:
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