Publicidad aap online digestivo locomotor

Hiperparatiroidismo normocalcémico y déficit de vitamina D



La presencia de concentraciones persistentemente elevadas de hormona paratiroidea (PTH) con valores de calcemia normales es un hallazgo no infrecuente, concretamente durante la evaluación de mujeres perimenopaúsicas con masa ósea disminuida, o en la evaluación o seguimiento de pacientes con osteoporosis.

Esta condición recibe el nombre de hiperparatiroidismo normocalcémico, y en estos casos es fundamental distinguir si se trata de un hiperparatiroidismo secundario o un hiperparatiroidismo primario normocalcémico, ya que los hallazgos bioquímicos pueden ser similares en ambos casos.

Su abordaje diagnóstico debe centrase inicialmente en la exclusión de todas las causas de hiperparatiroidismo secundario. De ellas, la deficiencia de vitamina D es la causa más frecuente de hormona paratiroidea elevada y calcio sérico normal. La relación exponencial inversa entre concentraciones de 25-OH-colecaciferol y de hormona paratiroidea comienza a aplanarse en los límites de 30-40 ng/ml de 25-OH-colecaciferol, por lo que para el diagnóstico de hiperparatiroidismo primario normocalcémico se acepta que los niveles de este deben ser superiores a 30 ng/ml.

Ante niveles menores de 30 ng/ml de 25-OH-colecaciferol, se recomienda administrar vitamina D durante un corto periodo de tiempo (2 ó 3 meses) hasta alcanzar la suficiencia de vitamina D, con monitorización de la calcemia por la posibilidad de desarrollar una hipercalcemia leve si se tratase de un hiperparatiroidismo primario. Si entonces la PTH persistiese elevada y el calcio sérico se mantuviera normal, y una vez descartadas otras posibles causas de hiperparatoridismo secundario (insuficiencia renal, tratamiento con antirresortivos potentes, hipercalciuria idiopática, malabsorción, tratamiento con litio o diuréticos tiazídicos,…), puede hacerse el diagnóstico de hiperparatioidismo primario normocalcémico.

En cuanto a la pauta necesaria para corregir el déficit de vitamina D, si estuviese presente, no existe una recomendación específica en pacientes con PTH elevada. Por lo tanto, parece razonable usar una pauta similar a la recomendada en paciente con déficit de vitamina D y PTH normal: 16.000 UI de calcifediol semanales durante 8 semanas, seguidas de un tratamiento de mantenimiento con 1.000-1.500 UI/día (16.000 UI cada 10 ó 15 días).


Bibliografía y referencias: