Los inhibidores del cotransportador de sodio y glucosa tipo 2 previenen el accidente cerebrovascular en los pacientes con diabetes y fibrilación auricular
La fibrilación auricular (FA) es la arritmia cardíaca sostenida más frecuente en la práctica clínica. La prevalencia aumenta con la edad y con la coexistencia de otras enfermedades, entre ellas la diabetes mellitus, que incrementa el riesgo de accidente cerebrovascular (ACV) alrededor del doble. La prevención de las complicaciones tromboembólicas es uno de los pilares en el manejo de todos los pacientes con FA. La evidencia demuestra que la escala CHA2DS2-VASc es la mejor a la hora de identificar a los pacientes de riesgo y ha sido validada en múltiples cohortes. Por otra parte, se ha demostrado que el uso de los inhibidores del cotransportador de sodio-glucosa-2 (iSGLT2) se asocia con resultados cardiovasculares favorables en pacientes con diabetes. Sin embargo, se desconocía, si los iSGLT2 disminuían el riesgo de ACV en pacientes con FA que tenían diabetes.
En un reciente estudio publicado en el Journal of the American Heart Association1 (mayo de 2023) los autores investigaron la relación entre el uso de los iSGLT2 y los eventos embólicos en una cohorte de 9.116 pacientes con FA y diabetes tratados con empagliflozina (25 mg/día) o dapagliflozina (10 mg/día) durante cinco años. La edad media fue más baja en el grupo de los iSGLT2 y la puntuación media de CHA2DS2-VASc también fue más baja en el grupo iSGTL2. Para evitar el efecto de confusión de estas comorbilidades se llevó a cabo un ajuste estadístico vía propensity score resultando una muestra analizable de 474 pacientes tratados con iSGLT2 frente a 3.235 no tratados.
Los resultados mostraron una tasa de ictus isquémico del 3,4% (IC95%:2,8–4,2) pacientes/año en el grupo tratado con empaglifozina/dapagliflozina frente a 4,3% (IC95%: 4,0-4,6) en el grupo no tratado (p=0,021). La utilización de los iSGLT2 se asoció con una disminución del riesgo de ACV del 17% (HR, 0,83 [IC95%, 0,70–0,98]; P=0,030).
Estos datos suponen el primer estudio en demostrar que los iSGLT2 se asocian con un menor riesgo de ACV embólico en comparación con otras terapias hipoglucemiantes. Además, los iSGLT2 proporcionaron una mayor protección contra el desarrollo de complicaciones tromboembólicas de lo que cabría esperar de sus efectos sobre el control glucémico solo.
Dado que los pacientes con diabetes son vulnerables a la arritmia cardíaca y al ACV, los agentes hipoglucemiantes orales como los iSGLT2, con efectos pleiotrópicos adicionales sobre la prevención tromboembólica, constituyen una nueva vía para una estrategia terapéutica óptima en los pacientes con diabetes y fibrilación auricular.
Bibliografía y referencias: